Separatismos de catalanes y vascos

Separatismos de catalanes y vascos.

Siempre que intentan imponerme una frontera, trato de ponerme del otro lado. Una vez un catalán me avasalló cuando me lo presentaron: Yo soy de Tarragona y no me siento español; yo soy catalán. A lo que contesté: Yo soy de Badajoz y me encantan Cataluña y los catalanes. Yo también soy catalán. Odio los necionalismos, ya sean vasco, catalán o español. Los catalanes quieren seguir vinculados a España pero con unas determinadas condiciones, sobre todo económicas, ya que España es su mejor mercado. El vasco de a pie, en cambio, siente que su país está colonizado por el imperialismo español. Intereses económicos muy grandes por parte de importantes peces gordos, a los que no les interesa de ninguna manera que los vascos se independicen, además de los abstrusos españolazos, han conseguido que se les niegue un referéndum. A pesar de que: 1- El idioma, la cultura vasca, los estatutos y fueros... quedaron reducidos a cenizas durante el franquismo. 2- No hay en Europa ninguna región, ni siquiera Irlanda del Norte, que tenga el grado de autogobierno del Gobierno vasco. 3- Durante la democracia, se han hecho cuantiosísimas inversiones económicas... El vasco sigue sin sentirse español. No se le puede comprar; la razón de su sentimiento va más allá del dinero. En Québec llevan autodeterminándose muchos años y sale que no, a los escoceses se les dio la oportunidad de votar y quisieron seguir perteneciendo al Reino Unido... A estas alturas del siglo XXI, y en una sociedad tan teóricamente libre y democrática, es injusto que a unos dos millones entre vascos y navarros se les obligue a pertenecer a un país y se les niegue el derecho a ser preguntados; se les niegue la libertad de preferir lo menos sabio.